Una joven identificada como Valeria Arenas de 23 años de edad, perdió la vida a manos de su pareja este fin de semana en San Antonio de Prado, Medellin, Antioquia, Colombia, ella deja una niña huérfana, mientras él se encuentra huyendo de las autoridades.
Los hechos se presentaron en la mañana del domingo pasado y según testigos el hombre había ingerido alcohol desde la noche del sábado y es sobre la madrugada que tienen una fuerte pelea.
Valeria Arenas López, de 23 años, fue asesinada en su casa, en un conjunto residencial de San Antonio de Prado, al suroeste de Medellín, durante una discusión que habría tenido con su expareja.
Este pasado domingo a las 6:17 a.m., vecinos del departamento Mirador de la Hacienda escucharon gritos provenientes de un departamento del quinto piso. Ante esto, aún sin tener pleno conocimiento de lo ocurrido, llamaron a la comisaría local, aprovechando que se encontraba a pocos metros del sector.
Agentes de la Policía Metropolitana llegaron al lugar y vieron a un hombre salir corriendo rápidamente de uno de los bloques. Al parecer, dejó caer la bolsa de ropa que llevaba en ese momento mientras huía porque tenía mucha prisa.
Mientras algunos policías uniformados intentaron perseguir a este individuo, otros fueron en busca del origen de los gritos con ayuda de vecinos cercanos. La mujer fue trasladada en una patrulla a la Unidad Intermedia San Antonio de Prado luego de que la encontraron tirada en la entrada.
Sus dos heridas, una en el abdomen y otra en el cuello, cobraron la vida de esta educadora de preescolar que trabajaba para la alcaldía de Itagüí, a pesar de los mejores esfuerzos de los médicos para realizar la evaluación necesaria.
El coronel Richard Fajardo, subcomandante de la Policía Metropolitana, dijo: "Lo que hemos recibido es que es un caso de intolerancia. Esta pareja se peleó. La mujer está siendo atendida por sus heridas, pero por lo mal que estaba, ella fallece en un centro de atención. "Se busca a esta persona, por favor ayuda. ".
El presunto delincuente fue visto sosteniendo un bolso y una mochila cuando fue visto por una cámara de seguridad esa mañana. Antes de salir del complejo de apartamentos, dejó caer la bolsa al salir del edificio y tomó el ascensor.
Para que la justicia haga su trabajo y garantice que el autor de este crimen rinda cuentas, el abuelo materno del fallecido, José Ovidio López, dijo que están atentos a que se haga justicia.
“Nosotros lo que pedimos es que hagan su trabajo como lo deben hacer. Que ese señor pague las consecuencias de lo que cometió”, manifestó el familiar.