La ciencia no deja de asombrarnos, cada año que pasa esta sigue creciendo, sigue profundizando y llegando a niveles que el pasado pensábamos que sería imposible, fantasioso o quizás que pensaramos que intervienen fuerzas de otro mundo, cosas de comics o historias de niños. Pero no. La ciencia tiene una rama llamada la física cuántica. Esta ha empujado los paradigmas que han trascendido a la ciencia, llegando a lo fantástico y lo increíble.
Esta ciencia cuestiona la propia noción de la realidad, de saber de conocer, de lo que nosotros pensábamos que era absurdo ahora es creíble, pero con una precisión y un exactitud increíble. Para dar un ejemplo de ello, tenemos los relojes atómicos que como lo indica su nombre son usados para medir el tiempo de una manera tan exacta que haría parecer a los relojes de la actualidad, los de cuarzo, como si fueran de la edad de piedra. Estos relojes atómicos son lo responsables de mantener en funcionamiento los satélites de GPS, el láser, las cintas magnéticas y mucho más.
Dado los enormes avances que están teniendo lugar en esta rama de la ciencia, algunos científicos creen que estamos en una segundo ola cuántica. Controlar lo cuántico no permitiría desarrollar cosas casi imposible de creer. Medicinas que tengan un efecto mucho más rápido y eficaz, lo cual significa que pudiésemos sanar más rápido.
Para concluir, no cerremos nuestras mentes a las nuevas posibilidades, muchos males desde la raíz se trataría o intentar quitarlos del medio. Parece inverosímil, pero poco a poco se va haciendo una realidad que nunca habíamos soñado, aunque queda por comprobar si este sueño llega a formarse y materializarse completamente para toda la humanidad.