El fue un héroe en la vida real. Nos referimos a Christopher Reeves, quien hizo el papel del Superman mas famoso y añorado de todos lo tiempos. El actor tuvo un triste percance, luego perdió la vida en el dos mil cuatro. Varios años después su esposa también. Su hijo menor William Reeves quedó sin padres casi en la adolescencia.
William es hoy un hombre hecho y derecho, y honra a su padre y a su madre siguiendo la filosofía de vida de ellos mediante seguir su ejemplo de generosidad y filantropía. Pero su vida no fue color de rosa, se enfrentó con muchos escollos. Es difícil quedar huérfano a los trece años, pero su madre hizo lo imposible para que su hijo no se quedara en necesidad.
El tiene hoy una sólida carrera, y una buena vida, era uno de los solteros mas codiciados y deseados. Luego se hizo locutor y es un buen deportista. Se toma la vida como debe ser, sin exceso, y mostrando un espíritu solidario. Ahora se encuentra trabajando como colaborador en ESPN, él esta haciendo lo que le gusta hacer. Es su amor a los deportes como el jockey entre otros.
Esta historia nos muestra que aunque algunos jóvenes desprecian a sus padres y se van de la casa sin mostrar honra a ellos, otros a pesar de su fama, han mantenido un espíritu humilde, como lo es William, quien valora lo que sus padres le enseñaron y siguió sus instrucciones. Todo esto lo ha llevado a ser muy apreciado y amado por muchos. Sigue luchando por los mismos ideales de su padres en contra del cancer. Todo esto nos enseña que los verdaderos heroes no tienen que llevar capa necesariamente.